Aparece Areli Zitlali Arista Hernández
La Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) ha informado que Areli Zitlali Arista Hernández ha sido localizada sana y salva. Según el titular de la SSPH, Salvador Cruz Neri, la joven ya se encuentra en su domicilio, después de haber estado desaparecida. Esto fue declarado en una entrevista matutina, justo tras el cívico en Plaza Juárez.
“Ya apareció, ya está en su casa, ya está sana y salva”, declaró Cruz Neri, ofreciendo tranquilidad a los ciudadanos que estaban preocupados por su bienestar. La búsqueda por Areli había movilizado a diversas fuerzas y generado tensiones en la comunidad.
Investigaciones internas tras la protesta
Durante la reciente protesta en la carretera México-Pachuca, surgieron incidentes de violencia que llevaron a la intervención de las autoridades. El funcionario anunció el inicio de una investigación en la Unidad de Asuntos Internos contra el policía involucrado en un altercado donde se agredió a un ciudadano.
El agente involucrado ha sido suspendido de sus labores operativas mientras se define su situación jurídica y administrativa.
“Nosotros no vamos a permitir actos de esta naturaleza”, indicó el secretario, asegurando que las sanciones adecuadas serán aplicadas por las unidades administrativas correspondientes.
Atención a los familiares y el contexto de la manifestación
Además de la situación del policía suspendido, se reportó que otro oficial resultó herido durante la manifestación y se encuentra hospitalizado en el ISSSTE. Cruz Neri explicó que
“Otro compañero está hospitalizado”
El funcionario también referenció un grave dolor en el estómago del agente, quien sufrió un golpe durante los enfrentamientos. A pesar de la difícil situación, Cruz Neri aseguró que hay un contacto permanente con la familia de Areli para ofrecerles toda la asistencia necesaria. Se les ofreció acompañamiento al C5i para revisar la información del caso.
Sin embargo, a pesar de un acuerdo previo de no obstruir la vía, los manifestantes cerraron completamente la carretera, lo que generó una fila interminable de vehículos.
“Había una fila de vehículos de aproximadamente 10 kilómetros”, explicó, lo que llevó a una opción de diálogo para abrir al menos dos carriles. A pesar de estos esfuerzos, la situación se descontroló y varios elementos de seguridad fueron agredidos.
Conclusión: La comunidad de Pachuca ha mostrado su preocupación por la seguridad y bienestar de los ciudadanos, mientras las autoridades trabajan para garantizar el orden y la justicia. La situación actual refleja una llamada de atención sobre el manejo de manifestaciones y el comportamiento de las fuerzas de seguridad.
