
Clausura Profepa de la empresa Truper en Hidalgo
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró temporalmente las descargas de aguas residuales de la empresa Truper en Hidalgo, tras comprobar que no cuenta con el permiso necesario para hacerlo.
El 13 de marzo, inspectores de la Profepa visitaron la planta, dedicada a la fabricación de herramientas de mano, como parte de un operativo para reducir la contaminación en los ríos más afectados del país. Sin embargo, la empresa se negó a permitir el acceso de los inspectores y tampoco presentó la autorización de descarga de aguas residuales, ni durante la inspección ni en los cinco días posteriores.
Ante esta situación, las autoridades colocaron sellos de clausura en las puertas de acceso del establecimiento. Truper vierte aguas residuales en el arroyo Colorado, un afluente del río Tula, sin demostrar que cumple con la normatividad ambiental.
Este río, de aproximadamente 130 kilómetros de longitud, recibe descargas industriales y urbanas, afectando la calidad del agua y la vida de quienes dependen de ella.
Declaraciones de la Procuradora Mariana Boy Tamborrel
«SEGUIREMOS CON LAS INSPECCIONES NECESARIAS Y APLICAREMOS LAS SANCIONES CORRESPONDIENTES PARA GARANTIZAR QUE LAS EMPRESAS CUMPLAN CON SU RESPONSABILIDAD EN LA PROTECCIÓN DEL MEDIO AMBIENTE», afirmó.
Contaminación del Río Tula por Actividades Industriales
El río Tula es uno de los cuerpos de agua más contaminados del país, afectado por descargas de la termoeléctrica, la refinería, la industria textil, cementera y papelera, así como por los desechos provenientes de la Ciudad de México. Las acciones de la Profepa son cruciales para poner fin a estas irregularidades y proteger nuestros recursos hídricos.
Las consecuencias de la contaminación son graves, no solo para el medio ambiente, sino también para la salud de la población. Necesitamos una vigilancia constante y sanciones efectivas contra quienes infrinjan las leyes ambientales.