
2028: La Sucesión Transexenal en Hidalgo
Se transita hacia el tercer año de la gestión del gobernador Julio Menchaca y la sucesión gubernamental ya deja las primeras huellas de una discusión de forma y fondo: ¿cuál es la diferencia entre líderes y sublíderes? La reingeniería constitucional llevada a cabo por las reformas de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo ha puesto de cabeza el ajedrez político de la nación, creando líneas analíticas en Hidalgo sobre los tiempos y movimientos en los que se presentará la estructura femenina que engrosará la disputa por la gubernatura en 2028.
En este escenario, la primera gran premisa que perfila la contienda interna en las fuerzas de Morena a la gubernatura en 2028, estriba en que la presidenta Claudia Sheinbaum desterró la “selección natural del poder político”. Esto permite el tránsito de jure (legal) de las condiciones para la transformación del poder político y sus vicios patriarcales. En este sentido, la visión de Sheinbaum ha permitido la selección empoderada entre líderes y sublíderes que marcará a la lideresa que encabezará el Poder Ejecutivo por primera vez en la historia.
La Unidad Política en la Contienda Electoral
La conducción política de Morena en Hidalgo no solo se está jugando la continuidad transexenal, sino el afianzamiento de una fuerza perdurable. La radiografía política indica que una lideresa es la interlocutora del pueblo, constituyendo una fuerza abierta y de proximidad plena.
La Importancia de la Conducción Política
La complejidad de la unidad política resalta la diferencia entre liderazgo y subliderazgo. La lideresa debe tener la capacidad para armonizar las diferencias y fundamentar la cohesión de las fuerzas que la respaldan. Asimismo, debe haber demostrado mediante su trayecto que su ejercicio público responde a los intereses del pueblo, asegurando la preservación de su mandato.
Hacia 2028: Diferenciación Selectiva en la Izquierda de Hidalgo
La fortaleza de la cohesión orgánica de la izquierda en Hidalgo descansa en la capacidad de la lideresa de articular un liderazgo de facto, en proximidad social, que se traduzca en decisiones firmes y solidarias. La selección de la próxima figura que represente a Morena para la gubernatura es crucial para el futuro político del estado.
2028 se acerca.