
YO COMO QUE OÍ… que Mónica Reyes Martínez y su papel en la seguridad
No es novedad que en el ámbito político, no todos los representantes están capacitados para desempeñar sus funciones. La diputada local Mónica Reyes Martínez, quien preside la Comisión de Seguridad y Justicia, es una clara representación de esta problemática. Durante una reciente sesión en el Congreso del estado de Hidalgo, la legisladora demostró su falta de preparación al compartir cifras incorrectas sobre feminicidios, limitándose a repetir un dato proporcionado sin realizar un análisis crítico del mismo. Esta actitud refleja un desprecio alarmante por la seriedad que exige un tema tan delicado como lo es la violencia de género.
El debate sobre la violencia de género en el Congreso
En la misma sesión, el Congreso de Hidalgo dedicó su tiempo a la participación de diputadas, aceptando que los hombres bajaran sus iniciativas para dar espacio a un debate necesario sobre la situación de las mujeres. En este marco, el diputado del PT, Francisco Téllez Sánchez, causó revuelo al referirse a las legisladoras como “mujercitas”, lo que generó rechazo inmediato entre sus colegas. Esta situación evidencia que, si bien se busca visibilizar la participación de las mujeres, aún persisten formas despectivas que limitan el avance colectivo.
YO COMO QUE OÍ… que Montserrat Aguilar y su lucha por la justicia
En un giro positivo, la activista Montserrat Aguilar, quien se ha enfrentado a diversas formas de violencia de género, fue reconocida por su iniciativa junto a la diputada Tania Meza para crear un delito de violencia de género en el código penal de Hidalgo. Aguilar ha sido un ejemplo de la resistencia y tenacidad que muchas mujeres ejercen en el ámbito legislativo.
Un aplauso merecido por el cambio
Cuando la propuesta de Aguilar fue presentada, fue recibida con aplausos por parte del Congreso, un reconocimiento a la valentía de quien ha sufrido en carne propia los efectos de un sistema que a menudo desestima las necesidades de las víctimas. Acceder a la justicia se convierte en una lucha monumental cuando faltan las leyes necesarias; su propuesta trata de cambiar esta realidad.
Al final, la labor de estas mujeres en el Congreso es fundamental para construir un marco legislativo que resguarde a las víctimas de violencia, pero también pone de manifiesto la necesidad de una formación más sólida y un compromiso real por parte de todos los legisladores. Es imperativo que en Hidalgo se tomen decisiones informadas y empáticas para el campo de la seguridad y la justicia, donde, en manos de personas apasionadas como Montserrat y Tania, reside la posibilidad de un cambio significativo en el estado.