
Marco Rico y la afiliación en Morena
La iniciativa de Marco Rico para seguir las directrices del proceso de afiliación hacia la militancia activa en Morena se alinea con los esfuerzos de la lideresa Luisa Alcalde. Este proceso, que se ha propagado a nivel nacional bajo la dirección de Andrés Manuel López Beltrán, es considerado un signo evidente de las estrategias del Plan Claudia, que busca fortalecer la 4T.
Los logros políticos de Morales se vuelven cada vez más evidentes ante la presencia del liderazgo de Claudia Sheinbaum. Las líneas programáticas que este ejercicio de gobierno ha establecido no han otorgado ni tregua ni respiro a las fuerzas del antiguo régimen, las cuales, por el momento, parecen estar sumidas en un estado de inercia, sin perspectivas de vislumbrar un proyecto político que represente a la nación.
El dilema interno de Morena
Empero, la situación dentro de Morena no es exclusiva de éxitos. La reciente afiliación de Miguel Ángel Yunes Márquez ha generado un rechazo notable por parte de la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, quien exhibe una fuerza política de Morena en constante crecimiento en su estado.
Esta postura de Nahle García se puede interpretar como un análisis político con implicaciones contradictorias.
Construcción del partido
Es importante resaltar que Morena es un partido político en construcción que heredó la estructura de un movimiento político. Los movimientos políticos, por su naturaleza, generan dinámicas intrincadas y grupúsculos de poder que pueden obstaculizar la cohesión. Deben actuar como plataformas orgánicas con principios e ideologías bien estructuradas.
Retos de reconfiguración
La transición de un movimiento a un partido político es uno de los retos más significativos enfrentar. La afiliación que Luisa Alcalde está promoviendo no debe interpretarse meramente como un reclutamiento político, sino como un acto que busca equilibrar y estabilizar el entorno político en Morena.
A lo largo de la historia, hemos presenciado la descomposición del PRD, un caso paradigmático que demuestra cómo la falta de estructura puede llevar a la fragmentación de fuerzas políticas y a conflictos internos. El caso de AMLO es elocuente en este sentido; al observar la incapacidad del PRD para mantener la cohesión, decidió cimentar Morena como un movimiento y establecer una estructura de liderazgo firme.
Mirada hacia el futuro
El episodio reciente del senador Cuauhtémoc Ochoa es un testimonio de la necesidad de mantener la disciplina y la organicidad en Morena. La afiliación activa que se promueve representa no solo un llamado a la acción política, sino también la prolongación del claudismo que empieza a vislumbrar las elecciones presidenciales de 2030.